lunes, 18 de julio de 2016

Cuento sobre un ciempiés que quería visitar mi casa

HISTORIA DE UN CIEMPIÉS

Hace unos días la ciudad de Durango se vio invadida por una plaga de gusanos. Cuando encontré el  primero en un patio de mi casa y me di cuenta de que tenía muchas patitas, pensé que quizá era un ciempiés recién nacido. De todos modos, lo mandé al paraíso de los ciempiés, como suelo decir. Al día siguiente, aparecieron más en el jardín y en el otro patio, así como también llegó un aviso de la administración sugiriendo que fumigáramos nuestro jardín. Todo esto me hizo recordar mi encuentro con un ciempiés hace diez años, cuando me mudé a esta casa, el fraccionamiento era casi campo y la ciudad no nos había alcanzado.

Una noche, encontré un  pequeño animal que nunca había visto antes y que se esforzaba por subir los escalones de entrada a mi casa. Parecía  un ciempiés,  medía unos diez centímetros y tenía numerosas patitas. Nunca antes había visto uno. Quise seguir la doctrina budista que recomienda no dar muerte a ningún animal vivo (en Durango no sería posible actuar así en relación con los alacranes porque la mortandad sería enorme. Por ejemplo, este año se contabilizan ya más de tres mil personas picadas por este arácnido), así que lo recogí cuidadosamente  con el recogedor de basura. Luego, caminé hasta la entrada del fraccionamiento y lo solté entre las hierbas. Le recomendé, como si pudiera escucharme y hacerme caso, que no volviera a las cercanías de mi casa.

No era extraño encontrar culebras, lagartijas, arañas en los lotes baldíos cuando hacía mucho calor y la hierba había crecido o cuando se iniciaba alguna construcción que los privaba de su hábitat. En esos días, había muy pocas casas habitadas en el fraccionamiento. La mía fue la numero catorce y era la única en la mitad izquierda del fraccionamiento, así que se volvía imprescindible acostumbrarse a estas sorpresas. Por fortuna, en esta área de la ciudad no es común encontrar alacranes aunque siempre existía la posibilidad de que alguno viniera escondido en el material de construcción como ocurre en el cuento “Muerte por alacrán”, de la escritora uruguaya Armonía Somers.

Una noche, cuando ya me había olvidado del ciempiés y rogaba no encontrarme con una culebra, lo  vi de nuevo. Había crecido y medía ya entre veinticinco y treinta centímetros. De nuevo, intentaba subir los escalones de la casa. Lo aparté con un palo, entré en la casa y tomé un insecticida. Sin compasión, lo rocié abundantemente. Se negaba a morir. Entonces, lo empujé con el palo hacia el centro de la calle y ahí lo dejé. Todavía pataleaba con algunas de sus patas. Ignoro si lo aplastó algún vehículo o si  se fue hacia el parque y, luego, al paraíso de los ciempiés. 

Comentarios sobre Fernando del Paso y su obra

FERNANDO DEL PASO:  EL PREMIO PRÍNCIPE DE ASTURIAS EN ABRIL DE 2016

Al recibir este premio, al inicio de su discurso,  Fernando del Paso evocó a José Emilio Pacheco y especialmente a su poema “Alta traición”, que es muy breve, pero pleno de contenido. Empieza así: “No amo mi patria/su fulgor abstracto es inasible”. Aunque estos versos suenan muy duros, los siguientes once  contradicen por completo a los dos primeros. Lo que le duele a Pacheco es la megalópolis en que se ha convertido la Ciudad de México, así como el entubamiento de los ríos, la situación del país,  así como la violencia. 

El discurso de Fernando del Paso también comienza  con unas dolorosas, aunque ciertas,  palabras sobre nuestro país. Dice así: “Las cosas no han cambiado en México sino para empeorar, continúan los atracos, las extorsiones, los secuestros, las desapariciones, los feminicidios, la discriminación, los abusos de poder, la corrupción, la impunidad y el cinismo. Criticar a mi país en un país extranjero me da vergüenza”. Luego, enumera una serie de situaciones y casos que a todos nos entristecen y avergüenzan, pero concluye con estas palabras: “No denunciarlo, eso sí que me daría aún más vergüenza”. Sigue después relatando muchos acontecimientos de su vida a partir de su nacimiento.

Fernando del Paso nació en la Ciudad de México en 1935. Inició su carrera literaria desde muy joven. Su primera novela, José Trigo (1966) narra varios acontecimientos relacionados con el movimiento ferrocarrilero, pero lo que más sorprendió fue su manejo del lenguaje. Siguió con una novela que llamó mucho la atención y que es de difícil lectura: Palinuro de México (1977) y que confieso que no he leído. Cuando estaba en la Facultad de Filosofía y Letras ningún maestro exigió su lectura y todos hablaban de las dificultades que presentaba.

El estudioso de la literatura mexicana, John Brushwood, dijo en alguna ocasión que los escritores mexicanos como del Paso, Leñero, Salvador Elizondo y Carlos Fuentes  en algunos libros como Terra Nostra (1975) parecían más preocupados por experimentar con el lenguaje que por la obra misma y esto nos disuadió de su lectura  a quienes empezábamos por el camino de las letras.

No cabe duda de que la novela más leída y comentada de Fernando del Paso es Noticias del Imperio (1987) no sólo porque se refiere al  fallido imperio de Maximiliano de Habsburgo y de su esposa, Carlota, en México, sino por su estructura literaria que rompió con todos los moldes que se acostumbraban en ese momento.

Está dividida en 23 capítulos: Los impares corresponden a Carlota y se titulan “Castillo de Bouchot, 1927), convento donde la desdichada hija de Leopoldo de Bélgica falleció en 1927 sin enterarse de todo lo que había ocurrido en el mundo, por ejemplo, la primera guerra mundial y la revolución rusa. También ignoró que llegó a ser la mujer más rica de la realeza de su tiempo porque heredó a su padre y, simplemente, el enorme Congo Belga, en África (hoy dividido en varios países). Sobrevivió a todos sus contemporáneos importantes, por ejemplo, el emperador Napoleón III, la emperatriz Eugenia, el mariscal Bazaine, considerado traidor por haber capitulado en Metz, durante la primera guerra mundial. Sobrevivió igualmente a mexicanos importantes de su tiempo: Antonio López de Santa Anna, Benito Juárez y  Porfirio Díaz, entre otros.

Los  once capítulos dedicados a Maximiliano están divididos en tres partes que, según indica del Paso corresponderían a los 33 años que  tenía el desdichado Maximiliano cuando fue fusilado en el Cerro de las Campanas. Además, tienen títulos individuales; por ejemplo, el IV se llama “Una cuestión de faldas, 1862-1863”, a su vez dividido en tres partes: 1. Partant pour le Mexique, 2. El archiduque en Miramar y 3. De la correspondencia –incompleta- entre dos hermanos.

Se trata, entonces, de una novela de gran complejidad que requirió de una larguísima investigación, pero que vale pena leer. Finaliza con el capítulo XXIII, titulado “Castillo de Bouchot, 1927” y que está dedicado a Carlota.

Escribió después otras novelas: Linda 67: historia de un crimen, Viaje alrededor del Quijote (2004), Bajo la sombra de la historia (2011), así como también poesía, entre la que sobresalen los volúmenes titulados Sonetos de lo diario  y  Pelota de diez colores.

Terminaremos con estos verso de Fernando del Paso:

Para cantar al mar,  no hay más enseres,
Para cantar al mar y sus placeres

Al mar azul, al mar y sus bahías
Al mar y al sol, espejo de sus días,

Al mar de vientre colosal, derroche
De lumbres verdes y de espesa noche

Que mis palabras, mis palabras solas,
Que navegan, sedientas en las olas:

Olas en las que el cielo cristaliza

Su esencia azul, alada y quebradiza. 

Carta a mi hermana. Le relato parte de la visita a Jefferson City, la capital de Missouri

43.- EPISTOLARIO SEMO

Cape Girardeau, Mo., 11 de abril de 1958

Mi querida Alicia:

Ya Javier Óscar me platica que estás guapísima; dice que el otro día no te reconocía. Te vio en la calle y se puso a pensar: “Esa chica tan mona me parece conocida. ¿Quién será? Al fin, te reconoció. No me sorprendería que al fin te conquistaras a Adolfo Peña.

Aunque los vestidos chemise me parecían muy feos al principio, ahora ya me empiezan a gustar y hasta me quiero hacer uno. Ya les llegaré muy modernizada.

Gustavo Domínguez no es muy mono que digamos, pero no tiene por qué caerte mal.

LLEGADA A JEFFERSON CITY. Llegamos como a las 6:00 p.m. y nos hospedamos en el  “Governor Hotel”. Como compañera de cuarto me tocó una chica muy simpática que a pesar de ser cuatro años menor que yo, nos llevamos muy bien. El cuarto estaba muy bonito y luego que nos arreglamos fuimos a comer y a pasear. Vi en una tienda unos aretes primorosos de los cuales quedé prendada, pero como no me quisieron abrir la tienda (ya habían cerrado) no los pude comprar. Luego regresamos al hotel y aunque todas las otras chicas estaban muy animadas, nosotras nos moríamos de sueño y cansancio, así que nos dormimos.

El día siguiente fue muy atareado. A las 9:00 a.m. fuimos al Capitolio y allí nos registramos. Luego,  visitamos todo el edificio. Es muy grande, con multitud de corredores, casi casi parece un laberinto. Aunque no está muy lujoso, está muy bonito y, sobre todo, limpio. La cúpula tiene unas pinturas bastante buenas, pero lo que más me gustó fue la Cámara de Diputados, Es muy grande, con escritorios para 150 delegados; los sillones estaban tan cómodos que como yo estaba tan cansada de caminar, me quería hacer diputada para quedarme allí.

Sigue con Eduardo. Recibe un abrazo de tu hermana


P.S. la continuación de la visita en la próxima carta.  

domingo, 10 de julio de 2016

Remodelación del Centro Histórico en Dgo. hace ocho años





LA REMODELACIÓN DEL CENTRO HISTÓRICO DE DURANGO

Creo que fue en la década de los años cincuenta cuando el centro histórico de la ciudad de Durango empezó a deteriorarse. O quizá fue entonces cuando nos dimos cuenta. Primero, hubo dos incendios, Uno consumió el hermoso edificio que ocupaba el almacén La Francia Marítima, propiedad de los señores Lombard  y Vinay, en la esquina de las calles de 5 de Febrero y Juárez, que después se convirtió en una tienda moderna sin ningún encanto. El otro dañó el entonces Cine Principal, hoy Teatro Ricardo Castro, que fue reconstruido y siguió operando como cine hasta finales de los años ochenta cuando el presidente Salinas de Gortari lo obsequió a la ciudad y se inició su remodelación para convertirse en teatro.

Por otra parte, antiguas casonas, como la de la familia Bracho, sobre la Avenida 20 de Noviembre, dieron paso a una serie de las llamadas boutiques que todavía perduran. Otras fueron remodeladas precisamente para convertirlas en locales comerciales y así obtener un mayor beneficio económico.

También desapareció otro bello edificio en la esquina de las calles de Victoria y 5 de Febrero que ocupaba la ferretería alemana propiedad de los señores Von Bertrab. Tal vez lo más doloroso haya sido ver cómo retiraban la cantera que cubría la fachada del Banco de Comercio en la esquina de la Avenida 20 de Noviembre y la calle Constitución dejando a un edificio, otrora hermoso, convertido en una edificio sin ningún atractivo.

Quizá fue en la primera década de este siglo que el arquitecto Fermín Soto Cesaretti y sus colaboradores concibieron el proyecto de la remodelación del Centro Histórico de Durango y obtuvieron los recursos necesarios para llevarlo a cabo.  Poco a poco los edificios que he mencionado recobraron su antigua belleza y dignidad. También fueron remodelados otros que estaban deteriorados y que entonces, con las obras realizadas sobre su fachada, recobraron su dignidad    embelleciendo el conjunto.

La historia y la ejecución  de este proyecto fue recogida  por el arquitecto Fermín Soto Cesaretti en su libro Remodelación en el Centro Histórico de Durango, publicado por Amaroma Ediciones, de Guadalajara, Jalisco, en 2010, y presentado en el Museo Francisco Villa, de Durango, en 2014. Incluye, asimismo, un prólogo de Carlos Vidal Ángeles, dos textos del arquitecto Soto Cesaretti, uno del filósofo Alberto Espinosa y otro de Delia Zúñiga.

Profusamente ilustrado con fotografías del ayer y de hoy da cuenta de cómo se inició la tarea y cómo fue desarrollándose poco a poco hasta su culminación. La inclusión de fotografías que muestran el estado en que se encontraban los edificios y cómo se aprecian actualmente permite al lector formarse una clara idea de lo que este proyecto significó para el centro histórico de la ciudad de Durango.

En la presentación efectuada en el Museo Francisco Villa, la escritora Rosa María Cortéz expresó las siguientes palabras que se refieren al arquitecto Soto Cesaretti y a su empeño en recuperar el centro histórico de la ciudad donde nació. Dice entonces que Fermín Soto

“le ha dado la vuelta al mundo para traer a esta calles lo que considera más bello de las antiguas y de las vanguardistas culturas, así como la avanzada  tecnología para hacer posible este hermoso renacimiento, conjugando el talento con el poder del primitivo adobe de tierra, del hierro forjado y de la piedra cantera que dan al centro histórico una luz propia y un efecto colectivo y permanente de cautivación”.

Por su parte, el autor afirma en la introducción titulada “Una nueva ciudad que surge del pasado” que, al  recorrer las páginas de este hermoso libro, el lector conocerá “la estructura urbana en diferentes momentos históricos de la ciudad, sus características de diseño, la utilización de elementos ornamentales de pasadas épocas, como la cantera blanca –material tan peculiar de Durango-, así como la intervención directa que propició nuevos cambios volumétricos en cada uno de los edificios, ya fuera en la extensión de fachadas como la recuperación de segundos cuerpos o monumentos enteros”.  


Quienes caminan por el centro histórico, principalmente los jóvenes, es posible que no reparen en la belleza de algunos edificios porque están acostumbrados a ellos. Sin embargo, quien visita la ciudad por primera vez queda favorablemente impresionado por la armonía de los edificios que enmarcan la Plaza de Armas mientras se dirigen lentamente hacia otro bello edificio de nuestra ciudad: el Palacio del Conde de Súchil (en la esquina de las calles 5 de Febrero y Francisco I. Madero) que hoy ocupa Banamex y que, en los años cincuenta, era un conservador almacén propiedad de los señores García. 


                                             

Breve historia de esta extraordinaria mujer

                                                          MARÍA MONTESSORI

Creemos que es un acierto que el Canal Once esté tan interesado en transmitir series sobre mujeres que han dejado huella en el mundo y que, de alguna manera, han contribuido a cambiar el destino de las propias mujeres. Hace unos días transmitieron apenas tres capítulos sobre la historia y la labor de esta formidable mujer que nació en Italia en 1870 y falleció en Nordwijk, Holanda, en 1952.

 Maria Montessori fue la primera mujer en ingresar a la Facultad de Medicina, en Roma, en 1892, a pesar del disgusto de su padre (pero con el apoyo de su madre) y de los profesores y alumnos inscritos en la carrera. Además, como en la serie aparece siempre vestida de blanco o de colores claros, hace un fuerte contraste con los trajes negros u obscuros de los profesores y compañeros, así como en su ideología.  En una escena, cuando tienen que hacer la disección del cadáver de una mujer, que está sobre la plancha totalmente desnuda, ningún hombre se atreve a hacerlo. Entonces, María se acerca, toma el bisturí y hace una incisión perfecta, sin ningún titubeo, desde el pecho hasta el pubis. Si fue o no cierta esta experiencia, en la serie sirve para acentuar el carácter y la decisión de María.

Se graduó en 1896 y al año siguiente se convirtió  en ayudante de la cátedra de psiquiatría. Su primera tarea consistió en encargarse de los niños considerados locos que estaban en el manicomio. Ella estaba convencida de que todos los niños podían aprender, aun si estaban enfermos, por lo que los trata con afecto y paciencia, sin golpearlos. Lo primero que hizo fue modificar el mobiliario. En lugar de las altas mesas y sillas de color obscuro donde apenas si podían sentarse los niños que generalmente se arrastraban por el suelo, se ocupó de que les cortaran las patas y que las pintaran de colores claros, con lo que el ambiente cambió  de forma notable. Después fue a un taller de carpintería donde encargó al carpintero que le hiciera las letras del abecedario y los números en una madera delgada, como si fueran juguetes, con los que empezó a enseñar a los niños a escribir y a contar.  

En ese tiempo conoció  y se involucró sentimentalmente con su colega Giuseppe Montesano y quedó embarazada. Pensaba que Giuseppe se casaría con ella, pero él no lo pensaba así y le confesó que estaba comprometido con una mujer más afín a su clase social. Como las leyes italianas obligaban al padre a darle su apellido, Montesano declara que así lo hará y se ocupará de su educación. Una vez que el bebé tiene ya dos o tres meses, se lo arrebata  y lo lleva a una granja para que una  nodriza lo alimente y se ocupe de cuidarlo. María se dirige a esa granja cada semana para estar con el niño al que llama Mario. Unos tres o cuatro años después, Montesano lleva a Mario como interno en un instituto para que continúe su educación, pero María investiga dónde está y lo visita cada semana. De hecho, según la serie, Montesano jamás muestra interés en conocer a su hijo quien, cuando ya es adulto se presenta en su casa para conocerlo, pero Montesano lo rechaza por lo que él decide cambiar su apellido por el de Montessori.

Durante todos estos años María Montessori se va consolidando como una especialista en los niños y modificando de manera notable la educación de los mismos. Se inaugura una escuela con su nombre en Roma y después en muchos países y ciudades. Viaja por toda Europa, donde se abren escuelas que siguen su técnica, y también a los Estados Unidos. Cuando Mussolini toma el poder, la situación se torna difícil, pero ella no se arredra aunque sí salió del país para protegerse.

Expuso sus ideas sobre la educación, especialmente de los niños down, en el congreso celebrado en Turín en 1898. Además, asistió a dos congresos internacionales para mujeres: uno en Berlín, en 1896 y el otro en Londres en 1899.  En 1938 publicó su libro El niño. El secreto de la infancia.

Nunca perdió el contacto con su hijo Mario, quien, a su muerte, continuó difundiendo las ideas de su madre.

Hoy en día cuando entramos a un jardín de niños o a una guardería pintada en colores claros y llena de juguetes, así como de pequeñas mesas y sillas, nos parece de lo más natural. Quizá ni sepamos, aunque la institución lleve el nombre de Montessori, quién fue esta mujer y de qué manera influyó en el cambio de la educación.


La actriz que representó a María Montessori fue Paola Castellesi; Giuseppe Montesano fue interpretado por Massimo Regio. El director de la serie fue Gianluca Maria Tovarelli y la música - muy apropiada, por cierto- es del compositor Mario Betta. 

Carta núm. 39. Me faltan 19 para terminar y luego veré cómo lo publico.

39.- EPISTOLARIO SEMO

Cape Girardeau, Mo., 31 de marzo de 1958

Mi querida mamá:

Hoy recibí tu carta con las sugerencias para la comida .Muchas gracias. La mera verdad es que no sé si vaya a prepararla o no pues Miss Cleaver nada más dijo que un día me tocaría a mí y a lo mejor de le olvida. De cualquier forma, es mejor estar preparada.

Estoy segura que aquí no podría conseguir  el orégano o el chile, así que si quieres mandármelos te lo agradecería mucho pues vale más tenerlos. Ya la cocada la hice una vea al tanteo porque no tenía la receta, pero salió bastante bien. Fue en casa de Mickey, durante las vacaciones de Navidad. Les hice arroz, cocada, el pastel envinado y tacos con tortillas de lata. Las tortillas no estaban muy buenas, pero como son las únicas que conocen, les gustaron mucho.

Ayer tuvimos nuestra comida de Pascua aquí en el dormitorio y estuvo sabrosísima. Fíjate que el postre era muy original y se suponía que representaba un huevo estrellado que es simbólico de la Pascua. Era una rebanada de pastel, bañada con crema batida y  encima una mitad de durazno. Se veía muy bonito.

Fíjate que ahora me sobraron invitaciones para las vacaciones. Tanto Mrs. Estes como Mrs. Pott y Mrs. Potashnik querían tenerme en su casa, así que quién sabe cómo se las arreglarían. El sábado pasado me habló Mrs. Potashnik y me dijo que la fuera a visitar porque tenía ganas de platicar conmigo. Cuál no sería mi sorpresa al ver que me quería para regalarme un traje sastre azul, entallado, muy bonito, un brassiere strapless, una flor para la solapa del traje, una blusa y dinero. Parecía Santa Klaus. Yo casi no podía creerlo pero era cierto. Yo no sabía ni cómo darle las gracias pues la verdad que es muy amable, pero como tiene tanto dinero ni lo siente. El abrigo que me dio lo he usado todo el invierno y bien que me ha servido pues con el frío tan espantoso apenas un abrigo tan grueso como ése. 

El sábado pasado en la noche llevé a Gerhard de visita con los Bollack. Nos divertimos cantidad pues también estaban el chino, el japonés y Sonia. Toda la noche nos la pasamos riendo a costa de Gerhard pues como no sabe mucho slang, el chino le estaba dando unas tomadas de pelo formidables.

Hoy, en la noche, fui a oír  el coro de la iglesia metodista cantar Las Siete Palabras. Estuvo precioso. De veras que tienen buenas voces. Ayer fui a la bendición de palmas y a misa de tres padres en St. Mary’s. Por primera vez desde que estoy en Cape tuve la impresión de estar en una verdadera iglesia.
El martes de la semana que entra voy a Jefferson City y regreso el miércoles. Como todos estos días el dormitorio va a estar cerrado, creo que no te escribiré hasta fines de la próxima semana para que ya sepas que no recibirás carta mía en unos día, pero no hay de qué preocuparse.

Dile a Gonzalo que otro día le escribo y que le voy a comprar sus canicas y se las llevo cuando me vaya. Pregúntale a Riqui qué le gustaría que le llevara. Te incluyo una carta para mi tía Luz.

Saludos para todos y recibe el cariño tu hija que no te olvida.


P.S. Gracias por el folletito con las estaciones del Jueves Santo. Voy a hacer lo posible por ir a rezarlas.  

sábado, 2 de julio de 2016

BORGES Y SHAKESPEARE - ANIVERSARIO DE SU FALLECIMIENTO

BORGES Y SHAKESPEARE

El 16 de julio se cumplieron treinta años desde el fallecimiento del gran poeta argentino Jorge Luis Borges, quien decidió morir y permanecer en Ginebra, Suiza, ciudad donde pasó su adolescencia y que siempre le trajo gratos recuerdos aunque eso no disminuyó su amor por su tierra natal. Lo recordaremos con el siguiente poema:

EWIGKEIT

Torne en mi boca el verso castellano
a decir lo que siempre está diciendo
desde el latín de Séneca: el horrendo
dictamen de que todo es del gusano.
Torne a cantar la pálida ceniza,
los fastos de la muerte y la victoria
de esa reina retórica que pisa
los estandartes de la vanagloria.
No así. Lo que mi barro ha bendecido
No lo voy a negar como un cobarde.
Sé que una cosa no hay. Es el olvido:
Sé que en la eternidad perdura y arde
lo mucho y lo precioso que he perdido:
esa fragua, esa luna y esa tarde.

El título significa "eternidad"

Veamos ahora estos dos famosos de la obra Julio César, de William Shakespeare, quien falleció hace cuatrocientos años. Se trata del momento en que éste acude al Senado donde sabe, pero no lo evita, que lo van a matar. En el camino se encuentra con el adivino que le dice "todavía no terminan los idus de marzo. Cuidado", pero César desoye la advertencia. Cuando lo están apuñalando, voltea y mira a Brutus, su discípulo amado, y le dice: "¿Et tu, Brutus?. palabras que significan. ¿Tú también, Brutus?
Más tarde llega Marco Antonio y le reclaman su presencia. Éste responde: "I have come to bury Caesar, not to praise him", que significa: He venido a enterrar a César, no alabarlo.

Así recordamos a estos dos grandes de la literatura en el mes de junio. Me faltó Cervantes, pero queda pendiente para la próxima vez.

Comentarios sobre la serie inglesa Downton Abbey

DOWNTON ABBEY

Se trata de una serie inglesa transmitida por el Canal Once los domingos, a las 9:00 p.m. (que es la hora a la que yo la veo), por los canales abiertos. Va en el sexto capítulo y no la vi desde el principio. Ahora me ha interesado mucho no por los vestidos de las señoras que son extraordinarios (la producción debe de haber gastado una fortuna en ellos y en los muebles del castillo) sino por el conflicto en las clases sociales que de una manera muy discreta empieza a surgir.  La historia ocurre a principios del siglo veinte; por ejemplo, se aprecia el impacto que el hundimiento del Titanic tanto en los señores como en la servidumbre porque ellas piensan especialmente en toda esa gente que ocupaba la  tercera clase y que ni siquiera tuvo la oportunidad de subir a cubierta porque los encerraron en su sección. Otra circunstancia que nos permite situarla en esos años es que apenas empieza la luz eléctrica, que es rechazada tajantemente por la abuela aferrada al pasado y renuente a los cambios, quien decide que la iluminación debe ser siendo a base de candelabros y velas.

Se trata de la numerosa familia Crawley que habita en un fabuloso castillo. Por supuesto, cuenta con una también numerosa servidumbre: el mayordomo, el ama de llaves, una doncella para cada señorita, una para la señora, un valet para cada señor, chofer, cocinera, ayudantes de cocina,  jardineros y todos los que se puedan necesitar para distintos menesteres. La familia suele organizar cacerías (suponemos que de zorros) cuando es la temporada y las mujeres montan en albarda (silla para las mujeres que van de lado) con gran destreza. Los caballos son extraordinarios y la jauría de perros va acorde con las circunstancias.

Aunque todo parezca que marcha como sobre ruedas, no es así. Por ejemplo, entre las doncellas hay una que tomó un curso de mecanografía (a escondidas) para buscar otro tipo de empleo. Cuenta con el apoyo de la más joven de las hijas de la familia que la ayuda a conseguir la entrevista en una empresa, pero finalmente es rechazada. Esta joven mujer está en contra del uso del corset, se interesa por el sufragio femenino y le gustaría votar, lo que escandaliza a la abuela, espléndidamente interpretada por  Maggie Smith. Entre los valets existe uno que toca el piano y al que le encantaría estudiar música, pero su falta de dinero se lo impide.

El ama de llaves que, en su juventud, prefirió tener ese empleo y la conveniencia de tener un techo y comida seguros por lo que rechazó a un pretendiente que sólo era un granjero, se lo vuelve a encontrar en una feria cuando ella tiene ya más de cuarenta años.  Él enviudó y su hijo murió en la guerra, por lo que es viudo y vuelve a proponerle matrimonio. Ella se inquieta y todavía no sabemos si se atreverá a renunciar a su puesto en el castillo para no estar sola en la vejez y disfrutar de una vida diferente con libertad.

Por el contrario, quien está muy satisfecho y orgulloso de su trabajo como mayordomo es Carson, que vigila sin cesar que toda la servidumbre cumpla a la perfección con sus tareas. Otro personaje interesante es Thomas, que fue suboficial del  ejército y precisamente al servicio del señor Crawley, quien tuvo que retirarse porque fue herido. Es aceptado en Downton Abby como valet a pesar de las protestas de Carson porque cojea y le cuesta mucho esfuerzo subir y bajar escaleras, lo que le impediría ser un eficiente valet, porque el señor Crawley lo recuerda con agradecimiento y lo defiende.  

Quien en estos momentos vive una situación sumamente difícil es Mary, la hija mayor del matrimonio (que no tuvo un hijo varón), porque ha fallecido el abuelo, quien tenía el derecho al estate (castillo, tierras, animales, joyas y dinero) que no puede heredar Mary porque quien aportó una dote formidable para aumentar la riqueza familiar fue su madre y que, en estas circunstancias, debe pasar a las manos de un varón.. Según las leyes inglesas de esa época quien debe recibir toda la herencia es un primo lejano que le disgusta a Mary,  quien está reacia a contraer matrimonio con él. Los televidentes no sabemos si finalmente ella se someterá a la tradición o si, arriesgando su futuro y sabedora de que dejarán de ser los dueños absolutos de todas sus posesiones, se arriesgará a rechazar al primo.

Las series y las películas inglesas siempre han sido interesantes porque están realizadas con sumo esmero. Downton Abby no es la excepción.


Diccionario sobre el español del noreste del estado.

DICCIONARIO REGIONAL DE DURANGO

Hace unos días participé en la presentación del Diccionario regional de Durango compilado por Natalia Mata Navarrete a lo largo de diez años. Este proyecto se inició quizá en 2005, cuando recibió la beca del FONCA (Fondo Nacional para la Cultura y las Artes) como apoyo para la investigación sobre la lengua popular de Durango, principalmente en la región noreste del estado. Al concluir, como la beca no incluía fondos para la edición del libro (que hubiera resultado muy pequeño), decidió continuar su investigación hasta tener el Diccionario que ahora ve la luz bajo el patrocinio del Instituto de Investigaciones Históricas, de la Universidad Juárez del Estado de Durango.

El libro tiene un subtítulo: Una mirada hacia el interior, que es interesante porque  se refiere tanto al interior del estado, una región donde ella vivió cuando niña y a la que volvió cuando realizaba la investigación para su tesis de licenciatura, como al interior de sí misma. Aun cuando nació en Mexicali, muy lejos de Durango, sus raíces estaban en esa región y ahora volvió a ellas con otra mirada.

Por mera curiosidad, busqué algunas palabras que me interesaban; por ejemplo, patol, tan común en Durango y tan usada en los días de Cuaresma porque con los patoles se prepara un guiso exquisito, y tan desconocida en otros lugares aun por los hijos de durangueños que no han visitado el terruño de sus padres. En su diccionario titulado Nahuatlismos en el habla de la Laguna, esa región formada por las ciudades de Lerdo y Gómez Palacio, en nuestro estado, y Torreón, Coahuila,  se informa al lector que el vocablo “deriva del náhuatl patolli, huesecillos como dados para jugar al patoa, jugar a los dados.  Entre los antiguos mexicanos el juego se practicaba sobre un petate con varias semillas de patol o colorín”.  Andando el tiempo, se jugaba también entre las personas de la alta sociedad; por ejemplo, Manuel Payno lo cita en su famosa e interesante novela Los bandidos de Río Frío cuyos sucesos ocurren en el siglo diecinueve.

Vocablos  como moyote (mosquito) y boje (que se ríe por todo y que ha ido desapareciendo sobre todo del vocabulario de los jóvenes) fueron incluidos por la escritora María Elvira Bermúdez (primera mujer mexicana en escribir novelas y cuentos policiacos) en algunos de sus textos con el fin de afirmar su origen durangueño.

La palabra soda (refresco) era usual en los años cincuenta cuando las sodas, de limón, naranja o grosella, fabricadas por La favorita, la compañía de don Plácido Rodríguez (cuando todavía no había llegado el refresco hoy universal) gozaban de gran popularidad.   Otra palabra interesante es  liacho (bulto)  que es –o más bien, debería escribir, fue- propia de esta región del mundo.  Busqué también la palaba jején (insecto) que, en Puerto Rico, cuando estuve allá, se refería a un microscópico insecto que se encontraba en la playa; y luego, en la toalla depositada sobre la misma para después  penetrar en la piel causando un intenso dolor. Lo padecí, por eso lo afirmo, aunque ahora la Dra. Cristina Mata de Orrante, nos informa que es común en Veracruz y con el mismo significado.  Interesantes resultan dos vocablos muy populares en Durango: navegar y batallar que significan más o menos lo mismo: enfrentarse a las dificultades propias del diario existir. Una palabra no tan antigua, bebeleche, que se refiere a un juego infantil, y con la que fue bautizado un museo para niños en Durango, en la Ciudad de México es conocida como avión.

Hoy en día el español popular se enriquece (o quizá, a juicio de otros, se empobrece con vocablos derivados del inglés y que forman parte habitual de los paisanos que viven allá y visitan su tierra una vez al año o de los que han regresado para quedarse. Entre ellas, podemos mencionar mueble (coche o automóvil), liquear (gotear, una llave de agua), yonke (lugar donde se pueden conseguir piezas usadas de todo), mopear (trapear), desponchadora (vulcanizadora), lonche (torta compuesta). Natalia Mata señala que los paisanos tienen dificultad para utilizar el modo subjuntivo (a decir verdad, la conjugación de los verbos en español representa un problema para propios y extraños). Por mi parte, dada mi experiencia en San Antonio, Texas, durante los años que viví ahí y que traté a muchos artistas conectados con el Teatro Guadalupe, pude observar que sólo manejaban con soltura el presente, el copretérito y el futuro (en ir a, por ejemplo, voy a comprar un vestido).

Otras palabras interesantes que escuché cuando regresé a Durango en 1975 y que pertenecen al español popular urbano son las siguientes: tiene los ojos borrados (azules), esa mujer está nueva (refiriéndose a una mujer de más de treinta años) y habla al pasito (quedito), por citar sólo unas cuantas.


Concluyo con unas palabras de Natalia Mata: Los diccionarios de regionalismos, tienen gran importancia porque “en ellos se registra la base de la riqueza léxica de la lengua española y, para los hablantes, ahí se plasma el orgullo de tener palabras propias, exclusivas de la  zona, las cuales forman  parte de la herencia y de la riqueza cultural de los habitantes de la región”.

Novedades para la primavera en Cape. Invitación para un concurso de inglés donde yo misma me derroté.

38.-EPISTOLARIO SEMO

Cape Girardeau, Mo., 28 de marzo de 1958

Muy querida mamá:

No creas que he recibido muchas cartas estos últimos días. Parece que a todos les entró la flojera de escribir.

El otro día fui a ver una exhibición de tennis aquí en el colegio. Hacía un frío tremendo, parecía enero, Total,  como consecuencia de la enfriada pesqué mi primer catarro, pero ya estoy casi bien. La tenista es profesional desde hace mucho tiempo y juega muy bien, aunque a mí me pareció que con el frío estaba bastante entumida pues en lugar de usar pantalones, se puso shorts y las piernas las tenía moradas de frío. Es inglesa y jugó en muchos campeonatos en su tiempo, pues ya se acerca a los cuarenta, aunque todavía está en buena forma. El muchacho clasifica como tercer lugar en categoría amateur en los Estados Unidos y jugó muy bien también. Es muy joven, así que tiene por delante un futuro brillante como tenista.

Eduardo escribe bastante bien a máquina aunque todavía le falta práctica. Además, tiene que aprender a doblar los sobres correctamente.

Mis vacaciones las voy a pasar aquí, unos días con Mrs. Estes y otros con Mrs. Pott. Esta última es la que vivió en México hace mucho tiempo y la que me llevó a pasear en octubre. ¿Te acuerdas que te platiqué? Aunque Mrs. Estes es muy amable, no me siento muy en confianza con ella, pero ojalá que todo vaya bien.

Rusty me escribió diciéndome que sentí mucho no recibirme en su casa esta vez, pero que quería que antes de regresarme pasara unos días con ella, así que tal vez las vacaciones entre primavera y verano las pasaré allá.

Estoy invitada a tomar parte en un concurso de inglés  el 15 de abril. El concurso es sólo para los estudiantes de primer año que han sacado buenas calificaciones en inglés. El premio consiste en una medalla de oro para el primer lugar y diplomas para los otros dos. El concurso va a ser de inglés, parte pura gramática y parte desarrollar un tema. Aunque mis probabilidades de ganar no son muchas, sí pienso entrar pues me dría un gusto loco sacarme uno de los primeros lugares. ¡Qué chistoso sería que una extranjera, en lugar de los americanos, se sacara un premio en un concurso de inglés!

Te mando unas fotos que Margaret Brannan tomó durante la última nevada. Yo no quería mandártelas, pero ella se empeñó.  Una, medio chistosa que no se sabe de qué es, es de unas plantas. A propósito, Sonia y Margaret se dieron el agarrón del siglo el otro día, se me hace que ya no se contentan pues estuvo muy feo.

Ya me ascendieron en el dormitorio y ahora soy anfitriona asistente a la encargada del dormitorio. La noticia cayó como bomba pues para ser anfitriona se necesita ser alumna de tercer año por lo menos y era la primera vez que una alumna de primer año es anfitriona. Creo que me ascendieron porque casi todas las chicas están de pique con la señora Blue y yo soy una de las pocas que la lleva bien; además, el otro día le dije que la comida estaba riquísima y esto le cayó muy bien. Yo estoy encantada de ser anfitriona.

Ya no hay nada que platicar, así que hasta la próxima.

Saludos a todos y recibe un abrazo de tu hija que te quiere.