miércoles, 26 de agosto de 2015

Continuo con el epistolario desde el Colegio.

Cape Girardeau, Mo., 5 de octubre de 1957


Mis queridos Papá Chuy y Mamá Pina:  

Un millón de gracias por el cheque, me va a servir mucho.

Aquí ya hace mucho frío, pero a mediodía hace calor. Además, a las 6:30 p.m.   está completamente obscuro. Es muy bonito caminar por los jardines y el bosque en este tiempo pues todos los árboles tienen hojas de distinto color y sopla un vientecillo medio frío, pero a gusto.

No se imaginan qué cumpleaños más bonito tuve. Comencé desde el día 3, pero eso lo leerán en la carta de mi mamá, así que les contaré mi fiesta de anoche. Comimos a las 5:30 p.m. y después me vine encarrrerada al cuarto, me puse unos pantalones y una blusa y me fui a la lavandería para lavar mi ropa en la lavadora  y poder plancharla hoy sábado.

Cuando acabé, como a las 6:30 p.m., me iba a venir a mi cuarto a escribir cartas, pero una de las muchachas vino y me dijo que me fuera a su cuarto, en el piso de abajo, a oír discos y yo, muy confiada, la seguí.  Luego, como a la media hora, alguien le habló y entonces me dijo: “Phyllis tiene un vestido nuevo. ¿No quieres subir a verlo?” Y dejó que me adelantara. Imagínense cuál sería mi sorpresa  al entrar al cuarto en esas fachas. La mayoría de las muchachas muy bien vestidas, todo muy adornado y una mesa preciosa con dos pasteles, bizcochos, café, regalos y tarjetas.

 Para colmo de desgracias, me tomaron fotografías con la boca abierta y los ojos pelones. Me cantaron Happy birthday y me regalaron unos pantalones de lana, lindos, una blusa blanca estilo camisero, aretes, pañuelos y muchas tarjetas firmadas por todas las chicas del dormitorio. El regalo sorpresa fue un tigre de peluche, muy grande, porque yo había comentado que nunca había tenido un peluche. Estaba tan sorprendida porque fingieron tan bien; yo las había invitado a comer pastel en mi cuarto y todas me dijeron que no podían porque iban a salir o tenían algo qué hacer, así que yo estaba muy desconsolada, pero luego me sentí tan feliz. Tan monas, invitaron a Miss Cleaver y a la chica de Panamá. Nos divertimos cantidad.

Saludos a todos y no dejan de escribirme. Reciban todo el cariño de su nieta que no los olvida.


María Rosa

Carta desde Cape Girardeau

Cape Girardeau, Mo., septiembre 20 de 1957


Muy queridos papás y hermanos:

Tu carta llegó aquí el día 18, así que hizo cuatro días, así que en tu próxima dime si quieres que escriba por ordinario. Ahora no lo hago porque no tengo timbres de esos.

A Cape llegué como a las 5 de la tarde y no perdí nada pues chequeé todos los velices en Laredo. La desventaja es que llegaron al día siguiente en la tarde y mientras yo no tenía nada que ponerme, pero aquí las muchachas me prestaron cosas y así me la pasé. El taxi me costó $0.85 y el boleto $3.50 más aparte $1.00 del lunch. Ya reclamé en el ferrocarril antes de que tú me lo dijeras pero no quisieron devolver nada. Me dijeron que lo único que podía hacer es utilizarlo para ir a San Luis antes del 7 de octubre.

La señora Rosita fue muy amable conmigo y pensaba escribirle, pero no te imaginas lo ocupada que he estado estos últimos días. Por ahora, pueden estar orgullosos de mí. Van ya como 4 ó 5 veces que he demostrado saber más que los gringos, mis compañeros, en materias que ellos debieran dominar pues les atañen más que a mí. Los profesores me alabaron y todos estaban asombrados.

Las clases en sí no son difíciles, pero el idioma me trae loca; es muy distinto hablar en una conversación a llevar materias en inglés , te tropiezas con palabras nuevas en los libros a cada instante, los profesores hablan muy aprisa y emplean slang, los  muchachos al contestar se ponen la mano en la boca y no se les oye bien. Total, que al terminar la clase entendí la mitad y la otra mitad se me escapó y no sé si en lo que no entendí iba algo importante.

El miércoles di un speech para el Parents’ Teacher Association en la May Greene School sobre las escuelas de México, y creo que no lo hice tan mal. Estos gringos son de lo más ignorantes; una de las preguntas que me hicieron fue que cuál era el idioma mexicano y a qué clase social pertenecía yo. Me regalaron un collar y unos aretes y no están tan feos. Anoche hablé para una asociación católica sobre Durango y sus habitantes. Fue una reunión de lo más aburrida  y me la tuve que aguantar toda, duró como cuatro horas. En honor de mi bella persona hicieron tamales extra gigantes y horrorosos. Me los tuve que comer y decir que estaban deliciosos,  pero me costó mi buen trabajo decirlo. Me regalaron una caja de polvo Coty; no estuvo tan peor después de todo.

Esta semana fue de iniciación para los alumnos de primer año. Nos vestimos elegantísimas con sombrero y guantes y luego nos colgaron tiras de papel blanco con el nombre del dormitorio y los números de teléfono; estaba estrictamente prohibido hablar con los muchachos, pero tuvimos que conseguir 25 nombres y direcciones por señas, de lo más divertido. Tuvimos que comer comidas cuadradas, es decir, formar un cuadrado en el aire antes de llevar la comida a la boca; por mala suerte, nos dieron chícharos y cosas que se caían del tenedor, así que se nos rodaba todo; en fin, bastante incómodo. Ayer, en la noche, fue la iniciación formal a las 10:30 p.m. Todas con vestido de coctel, en el comedor se leyó la constitución del dormitorio, brindamos y comimos. Muy bonito y muy nuevo también.

El miércoles en la tarde probé para ingresar al Aquatic Club. Estuvo muy difícil pues tuve que hacer muchas cosas de profesionales que yo no tenía ni la más remota idea de cómo eran. En fin, hice lo que pude y hasta hoy en la tarde nos van a decir quiénes son las verdadera nuevas socias.

Me compré una crinolina preciosa en $3.00 dólares porque la dependienta se equivocó; debían haber sido cinco y yo me quedé callada aunque me di cuenta. ¡Qué poco honrada soy!

Soy tan popular que vinieron a tomarme unas fotografías para el periódico y hoy me van a hacer una entrevista. Ya te mandaré los recortes, por hoy te mando uno.

Felicita a mi tío Jesús y a Tere de mi parte y diles que ya les pondré una  tarjeta.

Perdona la letra y los errores pero estoy muy de prisa porque en fin de semana tengo mucho que lavar.

Saludos a todo mundo. Un abrazo muy apretado de tu hija.


P.S. Contesta pronto porque me siento feliz cuando tengo carta.    

BARAK OBAMA Y EL PREMIO NOBEL DE LA PAZ

BARAK OBAMA Y EL PREMIO NOBEL DE LA PAZ


Cuando el recién electo presidente de los Estados Unidos, Barak Obama, recibió el Premio Nobel de la Paz en 2009 (el mismo año en que tomó posesión de su cargo)  por proponer como objetivos importantes de su gobierno el desarme nuclear, buscar la paz en Medio Oriente y apoyar la  lucha contra el cambio climático que en su país los ciudadanos no consideraban importante, muchas personas en el mundo opinaban que  había muchos otros candidatos con mayores méritos que Obama. Ahora que está por concluir su mandato, consiguió un logro importantísimo desde mi punto de vista: reanudar las relaciones diplomáticas con Cuba  que se interrumpieron el 3 de enero de 1961.  Por ello, el 14 de agosto de 2015 la bandera cubana ondeó en la capital de los Estados Unidos.

En 1964, el escritor Irving Wallace, en su novela The Man,  profetizaba que a pesar de los conflictos raciales, un día un afroamericano llegaría a ocupar la Casa Blanca. Ese hombre fue Barak Obama que, junto con su familia, ha habitado en esa mansión durante ya casi ocho años.

Obama ha tenido una vida sumamente interesante. Para empezar, nació en Hawaii en 1961, hijo de un africano, Barak Obama, de la tribu keniana de los Luo que, en 1959, cuando tenía 23 años, llegó a la Universidad de Hawaii. Fue el primer estudiante llegado de África. Estudió econometría  y en tres años se graduó como el primero de su clase. En un curso de ruso, conoció  a una chica blanca, Ann Dunham,  con la que contrajo matrimonio. De esa pareja nació Barak Obama, el actual presidente de los Estados Unidos.

Al concluir sus estudios, en 1963,  Obama padre decidió regresar a su país para ayudar a su desarrollo. Su esposa decidió no seguirlo y se quedó en Hawaii. El niño tenía apenas dos años y no volvería a ver a su padre sino hasta 1967 –y eso por un mes apenas- cuando cumplió seis años, tres años después de que Martin Luther King fuera galardonado con el Premio de la Paz. Quizá algo premonitorio.  

La madre de Obama contrajo matrimonio después con un hombre de Indonesia, por lo que la familia vivió en ese país. El propio Obama narra en su libro Dreams from my father (1995) que durante esos años él no estaba consciente de la discriminación racial. En el país asiático el color de su piel  no era tan diferente al l de los otros niños. Cuando llegó a Los Ángeles para proseguir sus estudios, se estrelló contra la discriminación pero sobrevivió. Después, se estableció en Nueva York, donde fue aceptado en la prestigiosa  Universidad de Columbia. Al graduarse, en 1983  decidió emigrar a Chicago para convertirse en un community  organizer (una especie de gestor) con el propósito de ayudar a las comunidades afroamericanas a luchar por sus derechos civiles y a mejorar sus condiciones de vida. Así empezó su carrera política. Luego, fue elegido senador y de ahí daría el gran paso hacia la Casa Blanca.

El 7 de febrero de 1962 el presidente John F. Kennedy decidió el bloqueo a Cuba. Este año, cincuenta y tres años después de esa decisión, Barak Obama y su grupo decidieron poner fin a ese bloqueo, aunque el embargo todavía continúa vigente, y el 14 de agosto de 2015 será recordado como la fecha en que la bandera de los Estados Unidos ondeó en la antigua sede de la embajada de ese país en Cuba. Cuando el muro de Berlín fue derribado en 1989 se sabía de la intervención del papa  Juan Pablo II en las negociaciones que concluyeron con la demolición del muro. Ahora, se comenta que en reuniones secretas en Obama y el papa Francisco hablaron sobre la posibilidad de reanudar las relaciones con Cuba.

Además de sus proyectos originales, Obama había decidido al comienzo de su mandato modificar en cierta forma los servicios de salud para los indocumentados. La propuesta no prosperó porque fue bloqueada por los republicanos. Lo mismo sucedió con la reforma migratoria que tampoco tuvo éxito. Ahora, el mundo espera para ver cuáles serán las consecuencias de la reanudación de las relaciones entre Cuba y los Estados Unidos.

Yo estuve en Cuba en 1982 con un grupo organizado por el Instituto Cultural Cubano. Fue una experiencia interesante pero la sensación que me quedó, independientemente del asombro por el avance de la educación, fue que el tiempo se había detenido en los años cincuenta. Regresé en 1985, acompañada por una compañera universitaria, ambas como invitadas oficiales del gobierno cubano para una serie de conversaciones con profesores cubanos sobre los métodos de enseñanza del español para extranjeros. Dada nuestra misión, fuimos tratadas a cuerpo de rey. Observé que algunos edificios estaban restaurados y había más alimentos disponibles, pero quizá sucedió porque estábamos alojadas en el Hotel Tritón que albergaba a muchos extranjeros de aspecto ruso o checoeslovaco.

He leído a muchos autores cubanos tanto a los que se fueron como a los que se quedaron y a los que lucharon por la independencia de Cuba; por ejemplo, José Martí. . Recientemente, al gran Leonardo Padura que será galardonado este otoño con el Premio Príncipe de Asturias por su obra literaria.


Ojalá la reanudación de las relaciones entre ambos país sea para bien de ambos y que Cuba no sea nunca más el “burdel” de los Estados Unidos, como decía Fidel Castro, y que los prisioneros políticos sean liberados.    

viernes, 14 de agosto de 2015

Carta a mis abuelos en sept. 1957

Cape Girardeau, Mo., 5 de octubre de 1957
Mis queridos Papá Chuy y Mamá Pina: 

Un millón de gracias por el cheque, me va a servir mucho.

Aquí ya hace mucho frío, pero a mediodía hace calor. Además, a las 6:30 p.m.   está completamente obscuro. Es muy bonito caminar por los jardines y el bosque en este tiempo pues todos los árboles tienen hojas de distinto color y sopla un vientecillo medio frío, pero a gusto.

No se imaginan qué cumpleaños más bonito tuve. Comencé desde el día 3, pero eso lo leerán en la carta de mi mamá, así que les contaré mi fiesta de anoche. Comimos a las 5:30 p.m. y después me vine encarrrerada al cuarto, me puse unos pantalones y una blusa y me fui a la lavandería para lavar mi ropa en la lavadora  y poder plancharla hoy sábado.

Cuando acabé, como a las 6:30 p.m., me iba a venir a mi cuarto a escribir cartas, pero una de las muchachas vino y me dijo que me fuera a su cuarto, en el piso de abajo, a oír discos y yo, muy confiada, la seguí.  Luego, como a la media hora, alguien le habló y entonces me dijo: “Phyllis tiene un vestido nuevo. ¿No quieres subir a verlo?” Y dejó que me adelantara. Imagínense cuál sería mi sorpresa  al entrar al cuarto en esas fachas. La mayoría de las muchachas muy bien vestidas, todo muy adornado y una mesa preciosa con dos pasteles, bizcochos, café, regalos y tarjetas.

 Para colmo de desgracias, me tomaron fotografías con la boca abierta y los ojos pelones. Me cantaron Happy birthday y me regalaron unos pantalones de lana, lindos, una blusa blanca estilo camisero, aretes, pañuelos y muchas tarjetas firmadas por todas las chicas del dormitorio. El regalo sorpresa fue un tigre de peluche, muy grande, porque yo había comentado que nunca había tenido un peluche. Estaba tan sorprendida porque fingieron tan bien; yo las había invitado a comer pastel en mi cuarto y todas me dijeron que no podían porque iban a salir o tenían algo qué hacer, así que yo estaba muy desconsolada, pero luego me sentí tan feliz. Tan monas, invitaron a Miss Cleaver y a la chica de Panamá. Nos divertimos cantidad.

Saludos a todos y no dejen de escribirme. Reciban todo el cariño de su nieta que no los olvida.


María Rosa

Encuentro de escritores 2015

ENCUENTRO INTERNACIONAL DE ESCRITORES JOSÉ REVUELTAS

Del 7 al 10 de julio de 2015 en la Ciudad de Durango

Con la participación, como estado invitado, de Sinaloa y del laureado escritor Elmer Mendoza, a quien se le hizo un reconocimiento especial al término de la inauguración, y de Luxemburgo, también como país invitado, el encuentro dio inicio el miércoles 8 de julio, fecha en que se conmemoró el 452 aniversario de la fundación de Durango por el capitán Francisco de Ibarra. Como actividad extraordinaria, el martes 7  los escritores locales esperaron a los sinaloenses en el puente El Baluarte, en la carretera a Mazatlán, lo que les brindó la oportunidad de conocer la sierra.

A los escritores procedentes de Luxemburgo,  se les organizó un paseo al rancho del mítico actor estadounidense John Wayne, así como a Villas del Oeste (antes conocidas como la  Calle Howard) donde todos los fines de semana se escenifican historias relacionadas con el oeste, y a Chupaderos, donde se filmaron muchas películas de vaqueros. Esa mañana, el sol radiante incendiaba el campo así que los visitantes también tuvieron una probadita del astro rey que nosotros disfrutamos todos los días.

Las sesiones de trabajo comenzaron la tarde del martes, pero comentaré sólo aquellas a las que asistí. Por ejemplo, la conferencia de Elmer Mendoza, titulada “Cómo me convertí en escritor de novelas policiacas”, divertida, amena y estupendamente preparada. No fue un texto leído, sino que de vez en cuando le echaba un vistazo a sus notas. La primera vez que oí su nombre fue hace muchos años cuando Carmen Aristegui (ahora vetada por la emisora MVS) y Javier Solórzano acompañaron al escritor español  Arturo Pérez Reverte a presentar su novela La reina del sur (convertida en telenovela hace algunos años  y protagonizada por Kate del Castillo y Cristina Urgel) en Culiacán. Fue entonces que Mendoza empezó a cobrar notoriedad y que se hablaba ya de las novelas sobre el narcotráfico. Ahora estoy empezando a leer Efecto tequila, publicada por vez primera en 2004 y finalista del Premio Internacional de Novela Dashiell Hammet. Es divertida, admiro el empleo de la intertextualidad (ahora llamada hipertexto) utilizando el rock, los cantantes famosos y frases comunes del habla mexicana, pero como no sé nada del rock, la lectura se torna un poco farragosa.
   
En una de las mesas de narrativa participó el buen amigo y estupendo narrador Jaime Gutiérrez Vargas, durangueño que reside en La Laguna. Leyó algunos trozos de un largo cuento (para no abusar del  tiempo asignado a los otros participantes) bien estructurado y con el buen humor que lo caracteriza. En mi opinión, excelente tanto por el texto mismo como por el respeto hacia los otros escritores. En esa mesa también participaron Imanol Caneyada (España-Sonora) que tuvo tantos problemas para leer de su tableta que perdí el hilo de su  texto; David Ojeda, quien la  manejaba mejor,  leyó un texto larguísimo solo para terminar con un soneto de Manuel José Othón y Ana Clavel, procedente de la Ciudad de México, quien llegó cargando sus libros porque no estaban en las mesas de venta. Ignoro si habrá logrado vender algunos. 

El famoso dramaturgo durangueño Enrique Mijares (más estimado en otras ciudades de la república y en Argentina, donde ha impartido diversos cursos, que  en su ciudad natal) participó igualmente en otra mesa de narrativa. Leyó un breve texto sobre los desaparecidos en Durango inspirado, según nos dijo, por una noticia periodística. Excelente y nos abrió los ojos y la mente respecto de una realidad de la que no estamos conscientes o que preferimos ignorar.

Este año se agregaron dos nuevas sesiones: “Literatura y traducción” y el conversatorio “La literatura y el cine”. No puedo dar más información porque, lamentablemente, no asistí a ninguna. Sin embargo, puedo afirmar que el director de cine Julio Bracho llevó al cine una obra polémica: La sombra del caudillo (1951) que estuvo enlatada durante muchos años por su contenido político. Un escritor argentino que estuvo en México a principios de la década de los años ochenta, Manuel Puig, escribió una novela excelente La traición de Rita Hayworth (1978) que se presta a comentarios muy interesantes en lo referente a esta actriz y la relación cine-literatura. La novela Doña Bárbara (1954), del  escritor venezolano Rómulo Gallegos, protagonizada por la muy joven María Félix, fue el inicio de su exitosa carrera y un claro ejemplo del uso del cine para dar a conocer una interesante novela.

En cuanto a la mesa “Literatura y traducción”, me gustaría sugerir que en el futuro se invitara a participar en dicha mesa a los escritores durangueños que han sido traducidos. Mencionemos a los que conocemos. Lucero Alanís de Gurrola, duranguense radicada en Guadalajara desde hace muchos años y hermana de Pilar, nuestra querida amiga ya fallecida, defensora del arte funerario del Panteón de Oriente, cuyo libro de poesía Los silencios del día fue traducido al francés en Canadá, en 2007, con el título Les silences du jour.

Por su parte, el poeta durangueño Juan Emigdio Pérez Olvera, que radica en Durango,  cuenta con dos poemarios también traducidos al francés por Éditions Alondra, Montreal, Québec, 2003:  Llama lacerada con el título La flamme blessée e Instinctos de luna,  con el título Instincts de lune que así se vendieron en ese país. La escritora Liliana V. Blum tiene también varios relatos traducidos al inglés, pero desconozco cuáles son y si fue o no mencionada en la sesión.

En mi caso, no tengo ningún libro traducido al inglés (lo que me haría muy feliz) pero sí me gustaría señalar que traduje varios libros de los hoy considerados como literatura de autoayuda para la Compañía General de Ediciones, ya  desaparecida, aunque a veces me he encontrado algún libro en los estantes de venta en el restaurante Vip’s. Además, traduje al español un ensayo de John Brushwood, el profesor universitario estudioso de la literatura mexicana, que se incluyó en un libro publicado por la UNAM.  Traduje,asimismo, muchos documentos legales para el bufete Basham, Ringe & Correa. Lamentablemente, toda esa actividad terminó cuando me radiqué en Durango.


El encuentro concluyó el viernes 10 de julio con un concierto y una cena. Creo que José Ángel Leyva, curador del mismo, se encargará de preparar una memoria que seguramente estará disponible el año próximo.